Así destacó Camila Maza Panella, representante de Jucovi (Argentina)  el compromiso de la nueva generación durante su encuentro con diversas cooperativas en la región de Serra Gaúcha, Brasil

La joven secretaria de Jucovi (Fecovita) de Mendoza, Argentina,  pudo visitar durante 13 días las Cooperativas que integran Fecovinho: Garibaldi, Aurora, Nova Aliança, Pradense y Noe, como así también las instalaciones de Fecovinho en donde pudo participar como oyente durante algunas reuniones junto a autoridades de la federación y de las cooperativas que la integran; a destacar la predisposición de Helio Marchioro con las juventudes al igual de Tiago Guerra y Sidimar Fleck

“Como estudiante de psicología me llamó muchísimo la atención la similitud entre ambas culturas, como productora mendocina, el clima y cómo afrontan el control del riego y los excesos de agua”, destacó la joven de Jucovi

Se llevaron a cabo visitas a bodegas boutique locales, donde se destacó el floreciente enoturismo de la región y la preparación de cada cooperativa para recibir a los visitantes. Se resaltó la atención personalizada para satisfacer las diversas necesidades de los turistas, culminando en tiendas de regalos donde se ofrecen ventas directas de botellas de vino y accesorios complementarios.

“También tuve la oportunidad de conocer otros destinos de la uva -además del vino-, tales como la Grapa o Cachaza y los jugos de uva y otras frutas.” resaltó Camila 

Junto con los jóvenes asociados Joel Menegat de Cooperativa Nova Aliança y Rodolfo Veadrigo de Cooperativa Pradense realizaron visitas a los propios viñedos y mostraron otras economías regionales, tales como el cultivo de tomates, frutillas, durazno, naranjas, manzanas, limones, higos, yerba mate, ciruela, peras, maíz, como también la cría de pollos y la ganadería compuesta principalmente por buey.

En diálogo con algunos productores de las cooperativas se advirtió que Brasil y Argentina comparten algunos problemas vitivinícolas tales como la mano de obra, tan necesaria en época de vendimia y -como dato de color-, se advirtió la presencia de varios argentinos contratados temporalmente para vendimia.

“Creo que las pasantías son muy importantes para que jóvenes de otros países puedan comparar tanto la forma de trabajo, el valor de la mano de obra, como así también la situación de cada país, la sucesión y administración de las propiedades. También las cuestiones culturales que hacen a las particularidades de cada país como lo es el carnaval en Brasil.” Comentó Rodolfo Veadrigo de una de las cooperativas  anfitrionas.

A modo de conclusión, se pudieron observar diferencias respecto a la geografía, al clima, a los caudales de agua, a las políticas estatales para con los viticultores y bodegas, la explotación del segmento turístico y la inclusión de mujeres y jóvenes; como así también, se pudieron corroborar las similitudes en dificultades atravesadas por los socios, en la cultura, en los valores cooperativos y en el funcionamiento de dichas cooperativas

“Fue una experiencia increíble, vuelvo muy agradecida y con muchos proyectos para comenzar a implementar, la vitivinicultura cooperativa de Latinoamérica tiene futuro, porque tiene jóvenes comprometidos con ella, hemos creado fuertes lazos y el trabajo en equipo será prioritario para ganar mercados en el mundo.” 

Gentileza: Camila Maza Panella